domingo, 1 de diciembre de 2013

Drogas y cerebro


El cerebro es quizás el órgano del cuerpo humano más complejo de todos. Lo más característico del cerebro es que da forma a nuestras emociones, pensamientos y comportamientos. Para ello las diferentes zonas del cerebro trabajan en equipo, coordinando y realizando funciones específicas. Dentro del cerebro en el sistema límbico es donde se conectan varias estructuras cerebrales que controlan y regulan nuestra capacidad de sentir placer. Ademas el sistema límbico es el responsable de que sintamos ciertas emociones, tanto positivas como negativas. Es en esta zona del cerebro humano donde se halla el mecanismo que al adulterarse con drogas hace que nuestro estado de ánimo pueda cambiar.
 
Todas las drogas piratean el sistema de comunicación del cerebro, puesto que este se pasa la mayor parte del tiempo hablando consigo mismo. Para que funcione bien el cerebro los 100 millones de células nerviosas que lo componen, las neuronas, están continuamente hablando consigo mismas. Para hacer circular la información entre ellas las neuronas se intercambian  unos mecanismos químicos, llamados neurotransmisores. Los neurotransmisores regulan un equilibrio sutil y complejo del que depende el conjunto de las funciones de nuestro cerebro. Cada neurotransmisor tiene su receptor específico en cada neurona de modo que cada receptor sólo enviará el mensaje después de interactuar con el neurotransmisor adecuado.  Entre cada neurona existe un pequeño espacio donde se produce una intensa actividad, este espacio se conoce como sinapsis y aquí es dónde las neuronas se intercambian los neurotransmisores. Los neurotransmisores son las sustancias que están detrás de cada pensamiento y emoción en los procesos de aprendizaje y de la memoria. Actualmente se han descubierto alrededor de 50 neurotransmisores, de los cuales la dopamina resulta crucial en la adicción a las drogas, pero también se sabe que una buena cantidad de ellos afecta a las adicciones. En cualquier caso las hipótesis en torno a la dopamina nos pueden ayudar a estudiar el problema de las drogas de forma más intrínseca y observar como en clave genética las personas que suelen producir menos cantidad de dopamina presentan mayores alteraciones de conducta. Poca dopamina en ciertas áreas pueden desencadenar los temblores y parálisis semejantes del parkinson y mucha da lugar a las alucinaciones y los pensamientos bizarros de la esquizofrenia. Cada vez que un neurotransmisor como la dopamina llega a la sinapsis los circuitos que gatillan el pensamiento y la motivación a la acción son disparados y esparcidos por el cerebro.

Algunas drogas como la heroína y la marihuana tienen una estructura química que imita a la de un neurotransmisor natural, lo cual "engaña" a los receptores permitiendo que se activen las células nerviosas, pero no las activan de la misma forma que los neurotransmisores naturales, haciendo que se transmitan mensajes anómalos a través de la red. Otras drogas como la anfetamina o la cocaína liberan grandes cantidades de neurotransmisores naturales, lo cual trastorna de manera temporal los canales de comunicación cerebrales.  

El núcleo accumbens, en la región del estriato, es considerada como la zona del cerebro  centro del placer, esta zona genera una intensa liberación de dopamina cuando se ingiere cualquier droga, entre 2 y 10 veces superior a la dopamina que se suele liberar normalmente. La dopamina es un neurotransmisor cuyos efectos pueden llevarnos a tomar más droga, este mecanismo, el de querer consumir más drogas, es quizás el primer paso hacia la adicción. Esto se puede entender mejor como la sensación de euforia que producen todas las drogas, lo cual "enseña" a repetir dicho comportamiento.

  La dopamina es  clave de los circuitos de recompensa y placer a los que se asocian las drogas, además se encuentra en regiones del cerebro que regulan el movimiento, las emociones, la cognición y la motivación. Se libera también dopamina mediante el juego compulsivo, la ingesta de alimentos y las actividades sexuales. Obviamente nuestro cerebro no fue diseñado para depender de las drogas, sino para activar sistemas de refuerzo que permitan la actividad sexual y la ingesta de alimentos. En general con todas las drogas la dopamina permanece activa en el cerebro con 300 veces más intensidad que en su estado normal, esto provoca a la larga que, con el abuso de drogas, se rompan los circuitos de dopamina del cerebro. A la larga, con las drogas, el impacto de la dopamina sobre el circuito de gratificación del cerebro se puede volver muy limitado, disminuyendo la capacidad que uno puede tener para sentir cualquier placer.  Los daños cerebrales que esto conlleva son cuadros depresivos y dificultades para la concentración. El individuo que abusa de las drogas necesita consumirlas solamente para que la función de la dopamina vuelva a tener niveles normales en su organismo, pero no sólo eso, sino que además necesita cada vez tomar mayores cantidades de droga para sentir el mismo efecto de euforia, característica que se conoce como tolerancia.  

La recompensa viene definida por el comportamiento y tiene 3 funciones:

1) Buscar algo diferente.
2) Identificar una recompensa.
3) Que se provoque la felicidad.

Otro neurotransmisor cuyos mecanismos se pueden dañar por culpa de las drogas es el glutamato, el cual influye en el circuito de gratificación y la capacidad para aprender y memorizar. De igual manera el uso continuado de drogas puede configurar adaptaciones en nuestros hábitos asentados en nuestra memoria inconsciente. El neurotransmisor que mantiene la adicción es tan potente que las personas, objetos, situaciones y lugares en los que se consumió la sustancia se quedan impresos en la memoria. Esto condiciona que ciertas señales ambientales se asocien con la experiencia de la droga y desaten los mismos sentimientos que se tenían en un contexto en el que anteriormente la droga se solía consumir, por ejemplo en una discoteca, aún cuando la droga no esté disponible. También está sobradamente demostrado como los fumadores, estimulados por el olor del tabaco, no pueden evitar la necesidad de encenderse un cigarrillo. En general la adicción deshace el autocontrol y la capacidad para tomar decisiones saludables mientras domina en la conciencia la necesidad de consumir más drogas.

El toxicómano es el adicto a alguno o varios agentes por los cuales se halla intoxicado. Entre los motivos que hacen al adicto buscar los alcaloides que le enganchen encontramos el miedo al dolor y las ansias de placer. El drogadicto se puede encontrar a gusto bajo los efectos de la sustancia pero el peligro es que a la larga todas las drogas alteran el sistema nervioso causando crisis que muestran síntomas parecidos a la esquizofrenia. No obstante no todo el consumidor de drogas se vuelve adicto con la misma facilidad, ello dependerá de los genes y el contexto social.

Los jóvenes se someten a las drogas en un contexto de grupo y de presión, a menudo no piensan en tomarlas, sólo forma parte de estar con el grupo de amigos. La libertad no tiene sentido si no hay un control voluntario, para que podamos hablar de un control voluntario ciertas zonas del cerebro tienen que funcionar correctamente. El propio libre albedrío depende de él mismo y condiciona el conjunto de la sociedad, gobernada por cerebros individuales.

El significado etimológico de la palabra adicto significa esclavo de una deuda, es una forma de como uno vendía su cuerpo como consecuencia de saldar una deuda.  Uno se hace adicto cuando se da cuenta de que tiene un problema, cuando la adicción se convierte en una razón para sufrir. Uno quiere reducir el consumo total o parcialmente pero no lo consigue. El fenómeno de querer y no poder es el verdadero criterio absoluto de la dependencia. La drogodependencia es un problema médico y comprendiendo los mecanismos de estos desajustes e intentando arreglarlos es como se llegará a la solución del problema. 

Hoy en día nadie suele asociar una conducta anómala al consumo de drogas, es decir, no se trata como un problemas psicológico, sino como una elección individual. La adicción es como un proceso de recompensa no controlado. Porque la adicción es tan grande que sobrepasa a cualquier otra recompensa. En la vida se dan muchos casos en los que un individuo puede elegir entre una recompensa inmediata y una posterior, pero mayor, esta misma analogía es lo que sucede en el consumo de drogas, en el cual se suele elegir la recompensa inmediata. 

En conclusión las drogas, suministradas repetidamente, perturban la manera fundamental de trabajar del cerebro. Si bien la adicción es el resultado del consumo voluntario de sustancias adictivas, la misma no es consecuencia de un comportamiento voluntario, sino que es incontrolable. Las drogas afectan a la motivación y a  zonas del cerebro que controlan las decisiones. El cerebro de un adicto es distinto del no adicto y el uso prolongado de drogas causa cambios en las funciones cerebrales incluso mucho tiempo después de dejar de consumirlas. Por estas razones muchos científicos se atreven a afirmar hoy en día que la adicción es una enfermedad cerebral. Desde que se reconoce que las drogas realizan cambios en los procesos cerebrales el principal tratamiento debe ser revertir y compensar dichas modificaciones.

Información de referencia: Documental drogas y cerebro del canal Odissea.

jueves, 4 de julio de 2013

Las castas de la India como control social

El sistema de castas de la India viene de una tradición muy antigua, tanto que se remonta a una historia de unos 2.500 años. En esa época los arios, un pueblo nómada, se trasladaron a la India viniendo de una tortuosa travesía desde los que actualmente es Afganistán, allá por el siglo XIV a.C. No sólo se asentaron en ese territorio sino que también crearon su propia cultura. El acervo cultural que crearon en ese momento lo conocemos hoy como  la civilización védica. El sistema de castas, del latín "castus" o puro, ha sido utilizado por otras civilizaciones, pero es en la India donde ha adquirido un mayor arraigo. La palabra casta la introdujeron en este territorio los portugueses cuando a finales del siglo XV el navegante Vasco da Gama descubrió una nueva ruta marítima hacia las indias atravesando el cabo de buena esperanza. El término indio para referirse a las castas es "jati" o nacimiento, lo que significa que es este hecho lo que condicionará la pertenencia de un ser humano a una casta u otra y, la actividad, costumbres, prácticas y privilegios que se le otorguen. Hoy en día todavía perviven  las castas en este país, solapándose con las clases sociales. Uno puede ser de clase alta y de casta baja, aunque esto suele ser muy minoritario. De la misma manera uno puede ser de casta alta y tener muy poco dinero.

Para gobernar el territorio los arios, que eran una etnia originaria de Irán, crearon un sistema de control social basado en las castas, dándole un trasfondo y un significado religioso. Sólo de esta manera pudieron dominar a los pueblos autóctonos de la India sin tener que recurrir a la fuerza bruta. Mediante esta especie de compendio basado en establecer reglas morales decoradas con historias de trasfondo espiritual, los arios, muy inferiores en número a los habitantes originarios del subcontinente indio, pudieron asentarse en este territorio, creando una sociedad en la que ellos estaban en la parte superior de las "clases sociales" que idearon, y por ello su derecho y autoridad prevalecieron sobre los habitantes autóctonos de la península de indostán.

  La mitología sánscrita de los arios estableció que los miembros de las castas más elevadas, los cuales tenían la piel más clara, eran considerados más puros, y los de las castas más bajas, los cuales tenían la piel más oscura, lo eran menos. Las leyes de Manu establecieron este sistema rígido, impermeable e inamovible. Uno hereda el oficio de su padre y no se puede casar con otra persona de otra casta en su existencia terrenal. Sin embargo hoy en día a simple vista no se puede determinar si una persona es de una casta u otra. En algunos casos por la profesión se podrá determinar si un individuo es de una determinada casta. Así por ejemplo un sacerdote siempre será de casta alta y un conductor de camiones siempre será de casta baja. En las zonas urbanas de la India el sistema de castas está menos asentado, pero en las zonas rurales este sistema está más arraigado en la sociedad.

Según esta mitología cada individuo provenía de las partes de una divinidad llamada Brhanã. Este es el primer ser o ser primigenio y mediante su sacrificio inmolándose nacieron todos los demás seres y cosas, incluidas las castas. El sistema de castas viene muy ligado al hinduismo, una de las tres religiones principales de la india, y con mucha diferencia la que más adeptos tiene en la actualidad, con unos 800 millones de creyentes sólo en la India, el país con más seguidores de esta religión en el mundo con mucha diferencia.

El sistema de castas se intentó abolir después de la segunda guerra mundial con la constitución india de 1947 sin demasiado éxito, ya que está arraigado desde hace milenios. Llama la atención observar que el padre de la constitución india era un intocable, un individuo al margen del sistema de castas, pero al cual este mismo sistema de castas lo discrimina en extremo. Este sistema viene de una larga costumbre y el proceso para que se desarraigue es necesariamente lento. Así pues cada vez es más infrecuente ver anuncios en los periódicos para concertar casamientos en los que se tiene en cuenta la casta. Costumbres parecidas de difícil desarraigo son la ablación en determinadas partes de África o la venganza privada en Albania.


Existen cuatro tipos de castas básicas en la India, sin embargo estas castas iniciales comenzaron a subdividirse, apareciendo 3.000 castas y 25.000 subcastas, todas relacionadas con la ocupación. En la actualidad el número de castas en lugar de disminuir aumenta en ramificaciones, ya que todas quieren adquirir prerrogativas que no son propias de su casta, sino de castas superiores. Las castas son completamente impermeables, es decir que los individuos de castas diferentes no se pueden relacionar entre sí. 

Los arios tenían su propia identidad social en la que pensaban que los aborígenes del subcontinente Indio, los pueblos drávidos, eran de clase inferior. Estos aborígenes concentraban sus asentamientos fundamentalmente en el sur de la India. Los indo-arios ridiculizaban a los drávidos llegando incluso a animanizarlos, llamándolos dasyu o dasas (enemigos). Algo parecido hicieron más tarde los romanos, los cuales llamaban a los pueblos no romanizados bárbaros, término que hoy en día se asocia a alguien de poca cultura y de rudos modales.

 Según los textos milenarios hindúes, escritos en sánscrito, cada casta significa varma o color. El sánscrito es la lengua indoeuropea más antigua que se conoce, la cual tiene semejanzas con el lituano. Esta lengua es sagrada para los hindúes como lo es el latín para los cristianos o el hebreo para los judíos. El primer texto hindú del que se tiene referencia de las castas es el purusha-suktã del Rig-veda. Las tres primeras castas están compuestas por los arios y la última casta está compuesta por los no arios.  

 En cuanto a las clases de castas por un lado están los brahmanes, es decir, los sacerdotes maestros y académicos. Son representados con el color blanco y a ellos debemos el yoga, la alquimia interior o las escuelas filosóficas hindúes. Los brahamanes se supone que nacieron de la cabeza del dios Brahma.

En un segundo nivel tenemos a los guerreros, o Kshatríyas (políticos y militares).  Esta segunda casta, simbolizada con el color rojo, salía de los brazos y los hombros de Brahama.

La tercera casta es la de los Vaisyas (comerciantes, artesanos y agroganaderos). Esta casta la componen un grupo de individuos bastante heterogéneo por sus funciones. Es representada por el color amarillo y simbolizan la clase media burguesa. Se suponía que salían del vientre de Brahama.

La última casta era la de los shudrás (esclavos, siervos y obreros). Esta era la única de las 4 castas no aria. Su color era el negro y se suponía que salían de los pies de Brhama. El simple contacto entre un brhaman y un shudrá viola del dharma.

Por último y al margen de este sistema de castas están los que no tienen casta, llamados parias chandalas o dalits. Éstos realizan los trabajos de menos importancia, tales como la recogida de excrementos, la limpieza de urinarios públicos o el curtido de pieles. Estas subcastas incluso no pueden beber de las mismas fuentes de las que beben los miembros de las demás castas.

La violación del dharma o deber ser conlleva que en la próxima reencarnación el individuo se reencarne en un ser de casta inferior o incluso en un animal, aunque también podría conllevar que la persona en cuestión adquiera la condición de paria y quede al margen de la sociedad. Sin embargo su cumplimiento conlleva que en la siguiente reencarnación el individuo adquiera una casta superior. En cualquier caso es imposible que una persona adquiera una casta superior en su vida terrenal. Una de las obligaciones que impone el dharma es que los individuos de una casta sólo pueden comer aquella comida preparada por individuos provenientes de la misma categoría.

 
La mitología indo-aria recoge en el Rigveda la conquista de la India por parte de los arios. Cuando los ingleses colonizaron la India y se enteraron de la historia compilada en los escritos del Rigveda la utilizaron para justificar su invasión bajo la excusa de una segunda oleada aria y así crear una casta superior a todas las demás castas que existían ya en la India. El Rigveda es el texto en sánscrito más antiguo que se conserva, en él los arios, con la ayuda del dios Indra, conquistan a los drávidos. Este texto es considerado como el primer libro que se escribió para justificar el racismo.

Dentro de ese sistema de estratificación social hay una subcasta dentro del conjunto de personas que está al margen del propio sistema de castas, los parias, es la de los invisibles. Los invisibles sólo pueden salir a la calle por la noche. Si alguien los ve por el día por la calle se arriesgan a que les den una paliza y que les metan en un calabozo sin darles de comer hasta que se mueran. La subcasta de los invisibles sólo se ve en ciertos sitios de la India. 





Si bien en las sociedades occidentales no existen castas como tal, sino clases sociales, últimamente se ha aludido a la clase política como una casta. La definición no es baladí, pero precisa para entender la comparación una explicación más pormenorizada...

martes, 21 de mayo de 2013

Turno de oficinas: Turnismo, encasillado, clientelismo.

En España hoy se habla de regeneración política, tal y como se hizo también a mediados del régimen de la restauración monárquica. El régimen de la restauración duró de 1875 a 1923, casi 50 años, fue el régimen más largo en el tiempo de la historia de la España constitucional. El sistema establecido por el conservador Cánovas establece que el rey sea un árbitro de todo el proceso electoral, el administra el poder entre los partidos y propone al partido de turno que gobernará. En esa época nunca perdía las elecciones el partido que las convocaba, por eso se decía que 'son los gobiernos los que hacen las elecciones y no las elecciones las que hacen a los gobiernos'. Aunque hoy no sucede exactamente lo mismo son los gobiernos los que configuraron la ley electoral, que da lugar a los encuestazos, el provincialismo y el bipatidismo. Circunstancias que nos hacen ver el sistema turnista del siglo XIX como una alevoría de lo que sucede en el siglo XXI, donde tenemos la sensación de que todo ha cambiado para que algo permaneciera como estaba antes.

En el turnismo el ministro de gobernación prepara las elecciones a través de la red de gobernadores civiles del Estado, de esta manera la oligarquía se apoyaba en las redes caciquiles que orientaban el voto de los campesinos de las zonas rurales hacia un partido u otro. Se llamaba en esa época "encasillado" cuando el cazique proponía que se votara a un candidato foráneo. En las elecciones democráticas actuales son los miembros de las cúpulas y camarillas de los partidos los que deciden qué candidatos son los que van a presentarse por una lista del partido político. En la época de la restauración el régiman manipulaba por muchos medios las elecciones, y se generalizó el término de pucherazo como sinónimo de fraude electoral, el pucherazo consistía en sabotear la urna electoral para que saliera el candidato que se prentendía. Sin embargo a conservadores y liberales no les hubiera hecho falta realizar esas manipulaciones del proceso electoral, ya que la diferencia entre los otros partidos, los republicanos y el PSOE, era un abismo. Estas prácticas fraudulentas se entendían dentro del sistema y adecuadas a su buen funcionamiento. Hoy en día las elecciones se coordinan por medio de encuestas y sondeos, celebrándose cada 4 años o anticipándose cuando un gobierno está ya muy deteriorado políticamente. Si bien no se dan situaciones tan flagrantemente ilegítimas como en la restauración, se intenta, por otros mecanismos, manipular el resultado de las elecciones y la conformación de la opinión pública.

Los encuestazos hoy en día se dan porque las encuestas condicinanan el inconsciente, llevando a tendencias de voto marcadas por la circunscripción provincial, lo cual da lugar al provincialismo, que arraiga en las viejas raíces caciquiles de los ámbitos provinciales y municipales. Hoy en día tenemos fácil el acceso a la información, pero no significa que estemos mejor informados con las encuestas y sondeos. Los medios de comunicación nos muestran un enfoque único sobre los resultados electorales, no nos detallan aspectos más importantes para, de forma subliminal, orientar a la opinión pública hacia los partidos políticos del régimen, los cuales defenderán siempre los intereses de las grandes corporaciones. En algunos casos estas macroempresas han generado una actividad económica más grande que los propios estados. Este sistema electoral actual da lugar a situaciones confusas. El sistema puede hacer que uno obtenga más representación con menos votos, lo que beneficia a los partidos nacionalistas que concentran el voto en pocas provincias; y menos representación con más votos, lo cual perjudica a los partidos minoritarios estatalistas que dispersan su voto en muchas provincias. El sistema electoral plasma una imagen que captan los medios de comunicación, sublimándose éstos en las vísceras políticas. La estrategia de los 'mas media' consiste en captar una diversidad ostensible que oculte una uniformidad real.

Hoy en día cada vez hay más gente que se considera apolítica, que se desilusiona por el mensaje que le transmiten los políticos y dejan de participar en el proceso electoral. Ante esta situación los partidos se dedican a trivializar esos aspectos, poniéndolos es una esfera secundaria y apartada del debate público. La abstención en las elecciones españolas suele ser de 1/3 del electorado. Pero icluso se manipulan los sondeos, pues en las elecciones al parlamento autonómico de Galicia en 2012 la abstención oficial que publicaron los medios de comunicación fue de un 35%, cuando aún no se habían contabilizado los votos del censo del CEDA. Contabilizados los votos del CEDA, que contenía los votos de los no residentes, la abstención acabó siendo de un 45%. En el momento en el que se lanzaron los resultados provisionales del escrutinio los tertulianos y analistas políticos de la radio y la televisión hicieron un exaustivo análisis de los resultados electorales destacando etiquetas como que la abstención no había subido. Los sondeos a pie de escrutinio es otra de estas estrategias maquiavélicas que se hacen para hacer subconsciente el inmenso resultado de las elecciones, con una imagen difuminada en un óleo de matices imprecisos al ojo de la sociedad colectiva anónima, que supone el electorado. El poder del olvido de las masas es enorme.



Cuando murió el dictador Franco se empezó a configurar un nuevo régimen en el que las oligarquías supieron interpretar muy bien las nuevas reglas que se plantearon durante la transición. Este régimen se caracterizó por la consolidación de dos grandes partidos en el poder, el partido socialista, representado por Felipe González, y el partido popular, cuyo lider era José María Aznar. El sistema tecnócrata desde el cual las oligarquías estabilizan y consolidan su poder se basa en el turnismo, el encasillado y el clientelismo. Lo mismo que se daba hace 100 años lo tenemos hoy en día, pero barnizado con una ligera capa de democracia para hacerlo más atractivo al electorado. Ahora tenemos un sistema proporcional, aplicado en la circunscripción provincial, que da lugar al bipartidismo, y unas listas cerradas y bloqueadas que evocan los encasillados y fomentan el clientelismo.

Como sucedía hace 100 años hoy en día aún pervive en el ámbito provincial una escuela caciquil, que antes se amparaba institucionalmente en los gobernadores civiles y ahora se escudan en las diputaciones provinciales. El cacique más conocido de España es Carlos Fabra, aunque ya no tiene el cargo político, su familia era heredera de las gobernaciones civiles del siglo XIX, las cuales se caracterizaban, y aún se caracterizan ahora, por realizar prácticas clientelares en provincias rurales o de poca población. En el siglo XXI, estas prácticas caciquiles aún existen cuando no se han sintetizado con los poderes económicos. Los caciques compran votos haciendo favores a la población rural. El lema de los caciques era 'los favores para los amigos, la ley para los enemigos'. Además un volumen importante de puestos de trabajo dependen del gobierno que ejerce el poder en ese momento, me refiero aquí a los oficios de confianza, como asesores, funcionarios interinos, consejos de administración de empreses y fundaciones publicas, think tanks, delegaciones de gobierno...etc. Hace 100 años, antes de la implantación del sistema burocrático webberiano, basado en los principios de igualdad, mérito y capacidad, los trabajos de funcionario público se consideraban como un patrimonio de los partidos de gobierno. Cada vez que cambiaba un gobierno cambiaban los funcionarios, los que se quedaban fuera pasaban oficialmente a la cesantía, percibiendo un pequeño subsidio hasta que cambiara el color del gobierno y poder ejercer su trabajo en el despacho oficial. La naturaleza de lo que antes se consideraba un soborno ahora se mimetiza en el sistema jurídico para intentar transformarlo en un 'quid pro quo', en una cosa por otra, un pacto legal e indirecto. Una especie de corrupción legal es lo que se puede observar ahora. Como ocurría antes, esta comparación intertemporal muestra como el núcleo de las cosas está corrompido. En los últimos casos de corrupción que han salido a la luz en España y que implican a muchos personajes públicos como los de Gürtel y el caso Campeón, muestran la manera usual de proceder de la cláse política, a través de dávidas y prevendas. Todo conduce a que las oligarquías pretendan establecer por medio de encajes en la idiosincracia caciquil un duopolio que esconda lo heterogéneo en su esponjosa uniformidad.

Es extraño como hoy en día la realidad política española nos muestra extrañas semejanzas con el régimen de la restauración monárquica. La restauración monárquica, que empezó en 1876, supuso la implantación del sistema electoral canovista, el cual se basaba en la alternancia de dos grandes partidos en el poder. Hoy en día, 100 años después, con la Constitución española de 1978, que acabo instaurando un régimen bipartidista atenuado, las sensaciones de nostalgia hacia épocas pretéritas florece en las comparaciones. En aquella época era una alternancia entre un partido liberal, liderado por Cánovas y otro conservador, liderado por Sagasta. Tanto en el régimen de monarquía parlamentaria actual como en el de la restauración había elecciones públicas para elegir a los miembros del parlamento. Cuando el gobierno de una de las dos fracciones políticas se desgastaba en el poder se alternaba con el gobierno del otro gran partido político, así como ha ocurrido en la España democrática, en la que PP y PSOE se han ido turnando en el poder conforme se iban desgastando sus respectivos gobiernos. Hace 100 años las elecciones eran falseadas por medio de varios mecanismos. Hoy se manipula el resultado electoral y el análisis de los sondeos en clave de gobernabilidad, que en virtud de lo que establece el sistema electoral impide que haya otra fuerza política fuerte al margen de las bipartidistas. Si bien hace 100 años no cabían otros partidos políticos, ahora cabe el multipartidismo en teoría, pero eso puede ser una mera hipótesis en el encasillado que suponen las listas cerradas y las circunscripciones electorales. Si bien es cierto que ahora cuando un gobierno no es fuerte se suele ver obligado a pactar con los partidos nacionalistas minoritarios, no hay ningúna dirección de gobierno que no pase por uno de los dos partidos mayoritarios.

martes, 14 de mayo de 2013

Atraparados

La Constitución dice que todo el mundo tiene el derecho y el deber de trabajar. Sin embargo a día de hoy el trabajo se ha convertido, en España, en un privilegio. Muchos de los que trabajan, tienen un sueldo,  cotizan, disfrutan de pagas extra y vacaciones pagadas, entre otros derechos que legalmente se reconocen a todos los trabajadores; cuando les preguntas por su trabajo afirman que les ha tocado la lotería. En realidad según el sistema jurídico todos somos iguales ante la ley, en la práctica eso depende de la situación personal y socioeconómica de cada uno. Uno no tiene el derecho a trabajar, sino que tiene la necesidad de que lo exploten de la manera que resulte más rentable al empleador. Uno no tiene el deber de trabajar, sino que tiene la costumbre de buscar una fuente de renta dineraria si quiere vivir de una forma a la que se le obliga a perseguir desde el nacimiento. Bajo estas perspectivas se está inflando una burbuja sobre el empleo asalariado que dará lugar autonomismo, o lo que es lo mismo, que todos seamos autónomos. 

Mientras tanto la economía sumergida está en el orden del día. Es una economía que se da actualmente en múltiples empresas para poder mantenerse en el mercado actual. Donde más se da la economía sumergida es en el calzado, la hostelería y la agricultura. El cobro en metálico y en negro no es más que el principio por el que se mueve la economía sumergida. Pero la gente, que por apuros, se tiene que regir por la economía sumergida ve como los políticos, en algunos casos, disfrutan de una parte importante de su actividad en régimen de economía sumergida, cuando ellos no tienen la imperiosa necesidad de hacer estas prácticas, por lo tanto esa gente corriente, moralmente no tienen la sensación de estar obrando mal.  Me refiero aquí a aquellos políticos que cobran comisiones y sobresueldos, por ejemplo, por una recalificación de terrenos. Los representantes públicos son los que más deberían regirse por los cauces legales en sus actividades económicas porque el dinero que financia su trabajo en las instituciones políticas viene de la economía declarada, la que paga los tributos que van a las arcas estatales. Y lo más seguro es que cuando acabe la crisis, si acaba de verdad, la economía sumergida no aflorará, sino que se consolidará, dejando como poso unas condiciones laborales para las nuevas generaciones que serán tan malas o peores como las que teníamos a principios del siglo XIX.

Siento que el peso del deber me aprisiona, pero a la vez me libera el aspecto de ver el trabajo como un derecho, cuyo contenido es tan vaciable como si su causa radicara en una adicción, la adicción por el margen de beneficio. Por eso pienso que yo no tengo la culpa pero soy parte de la causa de este descontrol aceptable, ya que tradicionalmente los comportamientos ligados a la economía sumergida han venido siempre tolerados por la mayoría de la sociedad, ignorando las consecuencias negativas que conlleva. Quiero decir que la ignorancia de las leyes no exige su cumplimiento, y esto no hay precepto que lo establezca, pero es una realidad irrefutable que está por encima del oficialismo jurídico. Por lo tanto me encuentro atrapado por la ignorancia de muchos que vacían unos derechos que nos corresponden a todos y, además, se enfrentan a mi cuando estoy luchando no sólo por mi sino por los derechos de todos. El sistema te obliga a ser un egoísta y a luchar sólo por tus intereses privados, porque si luchas por los derechos de los demás se aprovechan de ti.

Es difícil hablar de derechos cuando éstos se han desarrollado en un sistema de puertas entreabiertas para que unos cauces realistas consoliden el fraude de ley generalizado. Estamos fomentando un sistema, que vigilan ciertas élites, para generar fuentes de renta sin ningún incremento de la producción. Hablo de lo lo que no se quiere observar, del periodista que falta a la verdad, del político que provoca el engaño, del funcionario que se siente cómodo en la ambivalencia de las leyes..etc. Necesitamos un cambio inaudito, una novedad en el hacer y en el actuar. 

Hablar de igualdad requiere en un primer momento analizar la desigualdad para equipararla sobre un ajuste que equilibre las situaciones personales y sociales. Pero ya no se pueden hacer juicios de igualdad sin entrometerse en una literatura jurídica que resulta estúpida por el simple desglose de los contenidos. Esa división que limita marca los supuestos de aptitud legal y desafección permitida. En otras palabras, yo no soy igual a los demás, lo que me hace igual es mi desigualdad, todos somos iguales en nuestras desigualdades porque todas ellas existen en una misma realidad, la configurada por los Estados de derecho. Y esta es una realidad irrefutable, ya que no tenemos nada contrario a los estados en el ámbito  mundial, todo el espacio terrestre está dividido en trozos de terreno sobre los que rige una soberanía hipotética. Algunos autores se refieren a zonas grises (Somalia, parte de Méjico y Colombia, el norte de Chipre, la zona occidental de Paquistán...etc) pero estas se solapan con la omnipresencia de los Estados. 

Cuando partimos de una herencia iconoclásica y desvirtuamos la contradicción natural de dos partes encontradas por hacer prevalecer su derecho privado hay caminos que se desecan para crear la nueva infraestructura "utopráctica". Lo que quiero decir aquí es que el sistema funciona porque hay un ecosistema, este ecosistema, en el caso humano, es el de las economías de escala, el común equilibrio natural al margen paralelo de las normas. Las leyes resultan muchas veces estúpidas pero lo que las hace interesantes es su adecuación a la normalidad. Todo a lo que damos excesiva importancia es estúpido hoy en día y las cosas más importantes son vistas por la mayoría como una estupidez que reconforta el ego personal.

Ya somos desgraciadamente inconscientes de muchas virtudes practicadas desde cauces oficiales, que desechan lo que se instituyo anteriormente por criterios de oportunidad y consciencia. Los que no entran dentro de un marco regulador denominado objetivo, que parte, paradójicamente, de criterios subjetivos, son los indignados que no tienen más que reestructurarse para dispersarse y finalmente enmendarse.

Si bien podría determinarse una culpabilidad determinada con nombres y apellidos. Cuando el estudiante empezó a indagar observó que las hojas y la caja negra de la navegación habían desaparecido del códex jurídico.  La culpa inimputable es lo que se persigue con estas tendencias. Podemos dialogar hasta desgastar y cuando no funciona silenciar con argumentos que redefinen el silencio en clave de infinitud cuántica, que por su mismo circuito resulta cerrada e instituida.

Y es que la responsabilidad política es muy difícil de demostrar. No responde a una injusticia casual, sino que se basa en una causalidad, pero el inconsciente piensa de lo contrario. Es decir, y se lo complejo que resulta esto de entender, que no hay una causalidad directa dimanante que afecte a múltiples casos en abstracto, sino que se basa en la ficción de un poder otorgante y otorgado que es directriz de normalidad y fuente de toda normativa. Los errores de gobierno son reseñados como catástrofes inevitables. Dentro de toda esta confusión el poder justifica sus decisiones políticas y las irresponsabiliza, otra vez confusamente, por el principio de jerarquía administrativa. 

Para aclarar el párrafo anterior es preciso hablar de el tiempo, lo que se conoce como la cuarta dimensión. Ese aspecto de nuestra realidad tiene anclajes ineludiblemente personales. Por eso cada ley que se aprueba depende de la actualidad política y social en el momento determinado, aunque se base en criterios objetivos, al hacerlos en la práctica objetibables incurrimos en el fraude heurístico. Pues ningún criterio objetivo puede ser objetivable sin atender al tiempo por el cual ese criterio arraigó para establecer los preceptos jurídicos aplicables. Dicho de otro modo todo criterio objetivo debe ser subjetivable puesto en práctica. Y en este punto clave es cuando el criterio objetivo pierde fuerza al objetivarlo, lo que supone la ineptitud de los mismos criterios objetivos.

Lo que planteo aquí, reexplicado otra vez, es que la aplicabilidad de las normas no es lo mismo que su aplicación. Y la aplicabilidad de las normas corresponde a todo poder ejecutivo. La aplicación de las normas es un deber de los poderes públicos, pero la aplicabilidad es una obligación para ellos. En el momento de la aplicabilidad el estado tiene la obligación de ejercer sus funciones, pero en un punto equidistante entre el derecho y la costumbre, cuya ubicación es muy complicada de determinar, se cuela el margen de discreccionalidad, que le permite al poder ejecutivo aplicar o no una norma determinando unilateralmente el grado de aplicabilidad. Esto no es fácil de demostrar jurídicamente, sino que dependerá del caso concreto, por lo que hay que subjetivar los criterios objetivos.

Cualquiera que haya seguido la explicación puede saber a qué me refiero. Poniendo ejemplos en concreto: un policía puede determinar, unilateralmente y sin ninguna culpabilidad, si usted es culpable o no, jugando con ese margen discreccional que constituye la realidad sobre la aplicabilidad de las leyes, y no la irrealidad sobre su aplicación.

En conclusión: No hay trabajo porque el trabajo no es un derecho (aplicabilidad) sino un deber abstracto (oblicación) que sólo se convierte en un verdadero derecho-deber cuando hay un contrato, el cual se impone para recaudar y se supone para amortizar. 

miércoles, 1 de mayo de 2013

Los abusos judiciales en España

Sin entrar en casos y en ejemplos concretos, las últimas encuestas de opinión que se han hecho en España sobre la justicia han revelado que el ciudadano no tiene una visión positiva del sistema judicial. Para la mitad la justicia española funciona mal o muy mal y la mayoría piensa que es además muy lenta. La opinión generalizada es que la balanza de la justicia acaba decantándose por inercia hacia los poderosos o los que más tienen. Pero esta percepción sobre la justicia viene ya de mucho tiempo, y ha dado lugar a algunos refranes populares. A mi me llamó la atención cuando escuché que un juez dijo una vez "en pleitos no te veas ni aunque los ganes".


La corrupción judicial radica en el abandono del principio de imparcialidad judicial, trivializando la legalidad y ejerciendo una justicia en la que se limita y retrocede la carga de la prueba con la intención de emitir una decisión que perjudicará a la parte más débil en el proceso judicial. Esta corrupción afecta al derecho fundamental de los ciudadanos a obtener la tutela judicial efectiva en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos

El problema de la justicia es que el propio sistema judicial produce abusos a los ciudadanos. El poder judicial implica una enorme responsabilidad y eso se manifiesta en la propia independencia, reconocida por la propia constitución, de los jueces respecto al resto de poderes públicos.

Por corrupción entendemos las actitudes y actividades por las cuales una persona transgrede los compromisos adquiridos con otras, utilizando sus privilegios para obtener acuerdos cuyo objetivo es obtener un beneficio ajeno al bien común. Es mejor a veces aceptar una situación injusta en vez de enfrentarse a los que la realizan.

El Consejo General del Poder Judicial o CGPJ, si bien tiene por ley el control de las actividades judiciales, en la práctica sólo sanciona aquellos asuntos en los que hay una repercusión social o un interés mediático. El problema es que no hay que depender de los medios de comunicación para tener una auténtica justicia, si es que se le puede llamar a la justicia un concepto real.

La ley procesal es la que controla el proceso judicial. Mediante la ley procesal se puede desvirtuar la aplicabilidad de las leyes materiales. Un juez puede no admitir pruebas directamente relacionadas con un asunto, también se pueden preparar documentos falsos o aportar testigos falsos para obtener un resultado que interesa, pero eso es más difícil y más peligroso para el juez.

Un tribunal bufo es un procedimiento judicial que rechaza el debido procedo por razones de conveniencia, un juicio injusto y fraudulento en el que la decisión final se ha tomado de antemano, manipulando el proceso o negando la defensa. Una farsa judicial es realizar un juicio fraudulento con apariencia de legalidad, el resultado es que no se le proporciona al condenado ninguna de las garantías inherentes al proceso que le permitan tener acceso a la justicia.

Un delito de prevaricación lo puede cometer un juez al dictar una sentencia o una resolución injusta, a sabiendas o por negligencia. La prevaricación es un delito muy castigado por el Código Penal, pero la falta de disciplina judicial crea cauces para que pase inadvertida en nuestro propio sistema judicial. La razón principal de la prevaricación es que se produzca una ilegalidad tan flagrante que quede de manifiesto en la irracionalidad de la resolución, la cual pone de manifiesto su arbitrariedad.

Entre los posibles abusos judiciales tenemos las incapacitaciones fraudulentas. Estas consisten en abusar de la psiquiatría y decir que la víctima en cuestión tiene una enfermedad mental, que no se manifiesta externamente y sólo la puede dictaminar un experto. Otro posible abuso consiste en interponer querellas falsas utilizando la fiscalía para presentar una querella, sin pruebas y sin definir el delito en cuestión; y procesando el delito como si fuera correcto y legal. Además todo juez puede decidir qué personas tienen obedecer o no las leyes, de esta manera se pueden hacer resoluciones favorables a los amigos.

En cuanto a las trampas posibles del procedimiento tenemos múltiples artimañas judiciales para desvirtuar la propia justicia desde la institución judicial. En cuanto a las notificaciones a veces se le da a un empleado del juzgado para que firme una notificación o simplemente no se notifica la resolución, que sigue como si se hubiera notificado y fuera firme. Pero también en cuanto a las pruebas su manipulación se puede dar en múltiples fases. Muchos jueces deniegan las pruebas sin motivación (algo que se viene haciendo mucho), pero también puede darse el caso de cambiar la información que se ha enviado a un perito, o pedir un informe falso a la policía, o cambiar la información cuando pasa de un funcionario a otro o, simplemente, que el juez no haga caso de la prueba. En cuanto a los peritos, expertos y forenses, estos pueden manipular la información que tengan y sus informes, por lo que hay que mirar si utilizaron toda la información presentada y no se inventaron nada. Por último una trampa muy común es la de aceptar malos consejos, por ejemplo los funcionarios son capaces de decir cualquier cosa para hacer su trabajo más fácil y rápido, como pedir la firma en un documento diciendo que no tiene ninguna trascendencia.

No es nada fácil protegerse de esta corrupción impune con apariencia de inocente legalidad. Los operadores jurídicos son personas bien integradas en la sociedad y debido a la larga historia de corrupción que tenemos en España en el inconsciente colectivo se tiene la idea de que la corrupción es normal e inevitable. Pero ahora los ciudadanos se están dando cuenta de la magnitud de la corrupción existente y las reacciones ante tan ingente cantidad de corrupción están empezando a cambiar. La mejor protección es evitar el uso de su superior posición en contra. El punto débil de este sistema judicial es el propio orgullo de los operadores jurídicos y su énfasis en mantener la apariencia de legalidad en un asunto. El objetivo de los corruptos es que el expediente aparente tener un procedo legal aséptico.

Resulta incongruente pensar que el sujeto que se somete a derecho necesite protegerse de su propio abogado, que aparentemente está ahí para defender los propios intereses. La realidad es que los abogados trabajan para los tribunales y nunca van a hacer nada en contra de los intereses de los tribunales. En definitiva los abogados pueden ir en contra de tus propios intereses para obtener una resolución injusta en tu contra que desea el juez. Para evitar esto no hay que confiar nunca exclusivamente en el abogado. El abogado puede empezar bien y luego cuando se entera que el juez tiene un interés en el asunto se puede volver en tu contra. Uno tiene que mirar con detenimiento todo lo que hace el abogado y si hay algo que no se entiende hay que preguntárselo al abogado. En el caso de que el abogado no de explicaciones satisfactorias es recomendable acudir a otro letrado. En el mundo de las leyes nada es inexplicable y cada procedimiento se dictamina por referencias a varias leyes. No hay que permitir que el abogado te convenza de que no puedes saberlo todo. Por otra parte nunca hay que entregar los documentos originales al abogado, sólo copias o en cualquier caso copias certificadas ante notario. Han habido muchos casos en lo que los abogados han perdido los documentos originales, lo que impide su utilización en un futuro. Por otra parte hay que estar encima del letrado para no dejar que espere hasta el último minuto para presentar un recurso, son capaces de decir que lo van a presentar y luego no hacerlo, con lo que uno se puede encontrar con una resolución firme. Por último hay que solicitar al procurador que te envíe copias de todo lo enviado y recibido por el abogado.

El procurador es el operador jurídico que representa a las personas en un juicio. Los procuradores pueden hacer mucho daño si no reenvían al afectado los documentos recibidos por el juzgado. Aunque su ámbito de actuación para perjudicarte es más reducido, ya que tienen que demostrar que has recibido los documentos y eso sólo lo pueden hacer falsificando la firma.

En cuanto a los peritos forenses, se supone que son expertos sobre una materia en cuestión, por lo que resulta complicado desarticular sus conclusiones. La realidad es que dos peritos pueden analizar el mismo documento y llegar legítimamente a conclusiones opuestas. Para los corruptos esto supone que siempre pueden encontrar a alguien que les dé la opinión experta favorable a sus intereses. Muchos peritos trabajan directamente para los tribunales, como los médicos forenses y los expertos de la policía. Si se busca un perito nunca hay que indicar a éste ni que el juez tiene un interés en el asunto ni revelarle cuál es la contraparte. Por otra parte hay que obtener el informe del perito lo antes posibles, antes de que el juez se entere y pueda influir en el perito para cambiar su informe. Por último si los peritos necesitan una prueba médica en contra tuya tienes que alegar cualquier excusa para visitar al médico forense, en último lugar siempre puedes indicar que la constitución, interpretada de manera extensiva, prohibe que te obliguen a visitar a un médico forense.

Toda esta información esta sacada de la página "abusos judiciales" de la red Onion.

sábado, 20 de abril de 2013

Burocracia el desgobierno impune

La burocracia existió de manera arcaica en Egipto y en Roma, pero fue sobre todo durante el siglo XX cuando la tendencia predominante de los Estados modernos fue a la burocratización. Desde los 10 o los 12 años en Egipto el hombre que no trabajaba en el campo trabajaba en la oficina, el funcionario era el hombre culto y sabio que anotaba inventarios. Las grandes organizaciones que sobrevivieron a la edad media, cuando el oficio empezó a ser relegado, el imperio romano y la iglesia católica, estaban fuertemente burocratizadas. Los problemas planteados por sostener administraciones en grandes escalas tienden a la burocratización de las instituciones que mantienen el aparato estatal. La verdadera cuna de la burocracia moderna fue la monarquía absoluta preburguesa, que mantenía el precario equilibrio entre feudalismo decadente y capitalismo en ascenso. Con Felipe II (1527-1598) se empezó a institucionalizar una creciente burocratización de España. Resurgió el oficio de escribano en el reino pero con tintes negativos debido a la picaresca y con ella los sobornos y la corrupción.

La palabra burocracia proviene del griego -buro, que significa escritorio, y -cracia, que viene a ser gobierno. Hoy en día representa a aquello que entendemos negativamente como el gobierno de las oficinas. Y es que la tendencia actual que ven los teóricos sobre occidente es la excesiva burocratización, típica de una sociedad eminentemente gerencial. Lo cual nos lleva al gran complejo del fetichismo en todos los ámbitos de nuestra economía, en los que el hombre se halla a merced de las cosas, de la mercancía, incluso del dinero; esta consecuencia se conoce como reificación. Esto se entiende porque las relaciones humanas y sociales se objetivan, en cuanto los objetos parecen adquirir el poder y la fuerza de las cosas vivas. El problema aquí es que la apariencia no es sólo apariencia, sino también una parte de la realidad. El fetichismo del Estado y la mercancía está asociado al propio funcionamiento del estado y del mercado. De esta manera el Estado se convierte en un arma de doble filo al ser opresor a la vez que sustentor de la sociedad.

Cuando la tribu o clan empiezan a darse cuenta de que con la división del trabajo aumenta el dominio del hombre sobre la naturaleza y su capacidad de hacer frente a sus necesidades descubrimos los primeros gérmenes de la burocracia que se convierten en el más temprano preludio de una sociedad dividida en clases sociales. En las primeras sociedades burocráticas el administrador está completamente subordinado en el propietario, rasgo que se va atemperando con el paso del tiempo, para amoldar la burocracia a la visión burguesa de igualdad ante la ley.

La visión de la burocracia es grotesca y aterradora, relacionada muchas veces con la ciencia ficción distópica y el totalitarismo político. Otras veces se asemeja lo burocrático a la educación, las costumbres y los requerimientos que son asumibles en una sociedad cuya organización garantice la legalidad y la seguridad jurídica. No obstante, hoy en día, si ponemos en una balanza las connotaciones negativas y positivas que tiene la sociedad sobre la burocracia acaban dominando el concepto general las ideas negativas que se tienen de esta.

Mariano José de Larra (1809-1837) fue uno de los escritores españoles que realizaron una crítica más contundente a la burocracia. En su famosos artículo "Vuelva usted mañana" narra como un ciudadano francés que viene a España a invertir, con la intención de superar unos trámites administrativos en 10 días, acaba homologando sus papeles transcurridos 6 meses por culpa de la lentitud de la burocracia. Larra profundizaba su crítica a la inmovilidad de los funcionarios y sus labores rutinarias, y dejaba dejaba entrever otras razones más profundas, como que estos cuerpos fomaban una casta.

El primer estudioso de la burocracia fue el filósofo max Webber (1864-1920), el cual desarrolló una teoría sistemática sobre la burocracia, señalando sus cualidades a buscar. Según este autor la burocracia es una forma de organización y administración más racional. La burocracia proclama precisión, velocidad, claridad, regularidad, exactitud y eficiencia en las tareas gracias a la supervisión jerárquica, la división de tareas y fijación de la regulación normativa aplicable al caso. Para lograr la legitimación en la organización no es suficiente que alguien detente legítimamente el poder, sino que además hace falta una mínima organización administrativa que permita el ejercicio de ese poder. Con estas premisas Weber articula su teoría de los dominios, entendiendo que hay tres principios de dominación que permiten articular la legitimidad del poder:



A) Dominación carismática: El modelo funciona por la fe ciega en un líder. Si hay una organización administrativa resulta inestable e indeterminada.

B) Dominación tradicional: El status heredado deriva en organizaciones administrativas patrimoniales con resquicios de un sistema feudal, donde los funcionarios dependen de un jefe y están fuertemente vinculados a él.

C) Dominación legal: La ley es el criterio fundamentador del sistema y es independiente del líder o jefe que la haga cumplir.

Bajo estas premisas podemos entender que toda burocracia que ostente una legitimidad formal debe de haber pasado un proceso de desarrollo evolutivo, en el cual de una dominación sistemática se pasa a una tradicional para acabar cerrando el círculo con anclajes legales. Así la administración burocrática se basa en criterios de conocimiento (competencia) para que todo el sistema quede establecido de un modo aparentemente racional.

Mucha gente teme la burocracia, pero lo verdaderamente temible es la descompensación entre quien ejerce una función favorecido por el sistema objetivo y el que se somete a él, siendo protagonista, siguiendo un guión elaborado para realizar una gran superproducción que rente al estado y dé una imagen impenetrable de su poder. Hoy en día es de señalar que sobre todo las trabas burocráticas se dan en los procedimientos, muchos de los cuales están por encima de la capacidad de las propias administraciones.

Con la burocracia la autoridad legal se asenta en un sistema elaborado de normas abstractas establecidas intencionalmente. Los derechos y obligaciones de quién detenta la autoridad se dan en función del poder que ejerce. La persona que obedece la autoridad inconscientemente obedece los preceptos legales, no a quién ostenta el poder. De este modo las obligaciones inherentes a un cargo conllevan el reconocimiento de una autoridad jurídica dotándoles de medios coercitivos para hacer cumplir sus funciones. Cada cargo responde de sus decisiones y acciones ante su superior y responde ante este de la supervisión del trabajo de sus inferiores y asimismo dará cuentas a éste de las tareas propias que tiene encomendadas por razón de su cargo. Pero esta jerarquía de órdenes, intereses y capas administrativas es un legado del estado moderno en el que la burocracia que perpetúa la ficción de igualdad, pero acaba reforzando la desigualdad.

El sistema de empleo dentro del aparato burocrático tendrá en cuenta la antigüedad, la capacidad y los conocimientos técnicos. Sin embargo esta pretensión de que en el saber técnico y especializado hay que buscar el origen del poder burocrático ha sido puesta en cuestión. El manejo de la burocracia como grupo social revela que su poder está más ligado a su fuerte cohesión y al manejo de instrumentos específicos de poder que a su pretendida competencia. En los países capitalistas la burocracia mantiene estrechos lazos y participa de ciertos privilegios de la clase dominante, la burocracia se recluta en diversas clases sociales, esta fragmentada, presenta múltiples estratos y carece de espíritu social. En los países socialistas la burocracia no se fundamenta en la posesión legal, sino en el control real del estado, aunque la burocracia tiene una fuerte cohesión sus integrantes no representan a una clase homogénea, aunque su explotación en régimen de monopolio sea brutal y regresiva.


La jerarquía administrativa permite solucionar los problemas con objetividad, precisión e impersonalidad. A este respecto se observan varias tendencias, como la de aferrarse a un puesto para poder escalar al siguiente o a considerar la burocracia como fuerza neutral , inferior a los intereses de clase o partido.

Los grandes críticos de la burocracia opinan que debemos dejar libre una parte de la humanidad frente a esta parcelación del alma. La burocracia se entiende así como un aparato que va encerrando esferas aparentemente libres de nuestras vidas para categorizarlas en departamentos y subdepartamentos. En la práctica la mayor división social que significa la burocracia se da entre la mayoría de trabajadores que ejercen funciones manuales y una reducida minoría que se especializa en el trabajo mental. Esta máquina es como una jaula que aprisiona el espíritu humano, mutilando la universalidad e impidiendo el desarrollo completo del individuo. La pérdida de personalidad se da con la metamorfosis animal y la pérdida de libertad se virtualiza con una jaula. Cuando las luchas sociales en las sociedades burguesas altamente desarrolladas llegaron a un callejón sin salida fue entonces cuando la jefatura política pasa entonces automáticamente a manos de una burocracia.

El escritor uruguayo Mario Benedetti (1920-2009) narra en muchos de sus poemas el tedio de los burócratas. Aunque el Uruguay de finales de los '50 e inicios de los '60 se rige por las reglas democráticas el país soporta una enorme cantidad de funcionarios públicos. El escritor afirmó que Uruguay es la primera oficina del mundo que ha adquirido la categoría de república. Según su opinión esa vida confortable y esa seguridad convierte a los montevideanos en seres apáticos y conformistas.

La idea de burocracia como laberinto es clave con pasillos interminables, corredores sin fin, despachos y oficinas, montañas que amontonan expedientes que se refieren a múltiples procedimientos. Kafkiano ha sido considerado sinónimo de la despersonalización del individuo del estado burocrático. El imperio austro-burocrático que se daba anteriormente es lo que viene considerándose ahora como socialismo real. El papeleo puede hacer a los ciudadanos a desconfiar de sí mismos y además de su propio destino. De esta forma tenemos una vida libre que no responde a los mandatos legales, sino de costumbres y de principios que provienen de épocas remotas. Esta sería la explicación de como el confucionismo en china ha sobrevivido tantos milenios. En este imperio de los burócratas cada individuo ejerce un oficio de estado y todos los ciudadanos son funcionarios. Cada individuo se define por su función dentro de la maquinaria burocrática, es prescindible e intercambiable con cualquier otro sujeto de su misma jerarquía y su identidad personal carece de trascendencia.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Los hombres son de twitter y las mujeres de tuenti



En la antigua Grecia los hombres temían a las mujeres, por su superior energía sexual. Los griegos pensaban que las mujeres tenían un apetito sexual insaciable. Por todo esto eran apartadas de la vida social y política. Su función esencial era el cuidado de la casa y la procreación. Los hombres rara vez mostraban afecto público con sus mujeres y parejas.

Por otra parte en la Grecia clásica la homosexualidad estaba ampliamente admitida y los hombres preferían incluso a otros hombres para el placer sexual. Hoy en día se considera, por lo general, que los hombres buscan a una mujer para tener un contacto sexual y que las mujeres prefieren con los hombres una relación estable. Un hombre normal está siempre predispuesto a tener sexo con una mujer cualquiera en cambio la mujer es una incógnita. La homosexualidad está permitida pero es considerada antinatural, inmoral y rara.

Pero toda esa dualidad entre hombres y mujeres obliga a la larga a que cada parte asuma unos roles. A cada parte se le asocian unas características que, mayoritariamente, en mayor o menor medida, marcan la identidad sexual. Hay características que claramente diferencian hombres y mujeres como la vagina o el pene, otras como el mayor apetito sexual o la intuición, científicamente, no demuestran taxativamente una diferencia tajante entre lo intrínsecamente masculino o femenino; sin embargo la mayoría manda, tanto política como económicamente. El hombre y la mujer muchas veces están obligados a amarse, pero no a entenderse, ese verbo se reserva para conductas desviadas. Surgen así muchas preguntas que quedan aletargadas en el inconsciente colectivo, para muestra los botones de la chaqueta metálica:

¿Por qué los hombres no se sienten atraídos por mujeres inteligentes?

¿Por qué a las mujeres les gustan los chicos malos?

¿Por qué los hombres no respetan a las mujeres?

¿Por qué las mujeres son tan arrogantes?

Las respuestas concretas a estas preguntas se pueden encontrar fácil por internet y la mayoría de contestaciones aceptadas dan motivos antropológicos, los cuales comprende la mayoría de la población. Aunque mi pensamiento y la experiencia empírica me obligan a aferrarme al siguiente aforismo que intento hacer universalizable:

"Cada contraparte, si quiere algo en concreto, no debería ignorar las cosas grandes y ver sólo las pequeñas; pero si en cambio se quiere a alguien en concreto, no hay que ignorar las cosas pequeñas y vivir esforzándose simplemente en ver las cosas grandes."

La moraleja aquí es que no te puedes fiar de estereotipos, debes conocer a la persona en concreto. Sólo así se llega a la igualdad y a una sociedad auténticamente democrática, aunque esto sea otra historia más inconsciente, más colectiva.

De todas maneras me voy a permitir el lujo de dar una respuesta conjunta y desarrollada a todas estas preguntas conjuntas: Los hombres no se sienten atraídos por las mujeres inteligentes porque a ellas les gustan los chicos malos, lo cual no parece muy inteligente, pero esto lleva a los hombres a no respetar a las mujeres, lo cual hiere el orgullo de éstas y las hace ser arrogantes. Pero esta respuesta, no obstante, se debe a mayorías socialmente aceptadas.

Cualquier competencia es buena para afirmar la complementariedad entre hombres y mujeres. No la competencia para salir victorioso, para ganar, sino la que se usa para determinar un status dentro de una relación de pareja, la competencia quizás, en este caso, para asegurar la regeneración común de la especie humana. Cualquier regla se puede utilizar para entenderlo, desde que el hombre es de Marte y la mujer de Venus o que el hombre es de yahoo y la mujer de google. Pero aquí no regiría tanto la ley de la oferta y de la demanda sino, a mi juicio, la ley de la oferta y de la competencia.

Otra pregunta más interesante: ¿por que las mujeres ligan más que los hombres?. Es un poco absurda la cuestión porque las mujeres en realidad ligan igual que los hombres, si son heterosexuales. No es que los hombres compren y las mujeres vendan, sino que los hombres se venden muy mal, al estar la mayoría siempre dispuestos a un contacto sexual. Con esto me retomo al inicio entrada, en Grecia se sabía que las mujeres tienen más energía sexual.

Yo me imagino un mundo en el que el ser humano sea inmortal. Entonces habría una lucha extrema entre ambos géneros, que se habrían degenerado antropológicamente y se verían mutuamente como dos especies. De hecho mucha gente se refiere al otro género, de manera equivocada y a veces insultante, como una especie, siempre inferior, yo eso lo considero una especie de racismo primitivo.

Desde el inicio de la historia, desde la creación del primer tótem, se nos ha controlado grupalmente de muchas maneras. Hoy en día no nos reproducimos artificialmente como en una novela de ciencia ficción, pero quizás muchas veces sí que nos comportamos de esa forma. Los humanos nacemos como cerditos en un criadero, nos capan para controlar nuestros instintos (puritanismo), y nos cortan la cola y colmillos para que, en teoría, no nos mordamos entre nosotros (igualdad) y podamos crecer en las condiciones más higiénicas (pacíficas). Y así estamos preparados para que la sociedad nos consuma impersonalmente, algo que es inhumano. Sólo con el tiempo algunos recobran su identidad y les crecerán esos órganos, según la vida que han llevado. A los hombres nos hacen creer que somos más inteligentes que las cerditas pero en realidad es un reparto de energía, porque ellas pueden pensar menos y así dedicarse a otros menesteres. En las parejas, masculino y femenino, uno ocupa un roll pasivo y otro activo, y las decisiones siempre acaban tomándose, con estos principios, mediante un procedimiento de cooptación; o dicho de otra manera: el hombre propone y la mujer dispone. El hombre y la mujer cuando se unen forman una pequeña sociedad y cada uno tiene que tomar un cargo. Estos cargos se han establecido por mayorías sociales por pura economía capitalista, por la mano invisible de un hombre que moldeó la idiosincracia femenina.


Por otra parte pienso que los hombres gastan, directa o indirectamente, una energía descomunal para seguir los ritos sociales y poder aparearse con una mujer, cosa que les lleva a frustrarse muchas veces cuando no consiguen su objetivo y muchos tienden, por arrogancia, a transformar su amor en odio, esto es un mecanismo que se adopta por el subconsciente y se conoce como "formación de reacción". También muchas mujeres tienden a transformar su desinterés en odio, en este caso, con estas circunstancias, el mecanismo subconsciente se llamaría "desplazamiento".

Como los hombres gastan más energía y su estructura genética está más adaptada para realizar trabajos físicos, idearon el dinero como una representación tridimensional de su poder. Esto les facilitó a muchos comprar a las mujeres, en lugar de tener que ganárselas con comunicación y confianza. Esta estructura hoy en día no se sostiene por ningún lado, por eso a la mujer le resulta tan fácil socavar el débil orgullo masculino. La mujer suele esperar, por lo general, una conducta determinada de los hombres. Esto es así porque aunque parezca que el hombre es socialmente superior a la mujer, en realidad esta superioridad no se da por inducción, sino que es una argucia que el predispone y la mujer consiente. Una mujer puede seguirle el flirteo a un hombre por muchos motivos, pero siempre esperará que el hombre flirtee con ella por un sólo motivo.

Cada sociedad tiene unos patrones de conducta y unos rolles para hombres y mujeres. El hecho de que la sociedad occidental predomine en el planeta no significa que sea la única. La naturaleza no puede absorber tanto abuso a su matriz.

La androginia se considera, en psicología, cuando una persona tiene un equilibrio entre características psíquicas que tradicionalmente se asocian a lo masculino o a lo femenino. No podemos afirmar que un hombre es menos masculino si cuida de sus hijos y hace las tareas de la casa, o si no le gusta el fútbol y en cambio le gustan las telenovelas. Ni las mujeres pueden considerarse menos femeninas si se acuestan con muchos hombres, o no llevan nunca tacones o toman la iniciativa para iniciar una relación con un hombre. Creo que esto es algo que puede entender cualquiera. Generalmente se acepta socialmente mucho más al hombre andrógino que a la mujer. No en vano el prefijo andro- se refiere a lo masculino. De hecho genéticamente el hombre se considera un cigoto con cromosomas básicamente femeninos que en algún momento de la división celular adquirió las características básicas del género masculino.

En definitiva la identidad sexual masculina y femenina no se adquieren con el nacimiento, sino que se van desarrollando a lo largo de toda la vida. Así por ejemplo a las mujeres les crecen los pechos y tienen la primera regla en la pubertad. En cambio en esta fase del crecimiento a los hombres les crece el vello corporal y adquieren un tono de voz más grave. Sin embargo es cada vez más común en los hombres que aparezcan especímenes sin apenas vello corporal, cosa que no acaba de desagradar a la mayoría de las mujeres. A las mujeres les gusta, cada vez más, que los hombres sean agradables, que les hablen con palabras bonitas y que les traten con delicadeza. Todo esto no es muy compatible con un organismo acostumbrado a producir testosterona. Además en el mundo occidental el esperma masculino cada vez es de peor calidad.

Si la ginecología es la parte de la medicina que trata las enfermedades del sistema reproductor femenino, la andrología es la contraparte, que se encarga del funcionamiento anormal de las funciones reproductivas del hombre. Esta última disciplina es relativamente nueva.

El debate está abierto...

domingo, 24 de febrero de 2013

Las técnicas EFT y de Reimprimación Matricial

Hoy en día es muy común que muchos males de la salud humana se traten mediante pastillas y sustancias. Se dice que la gran plaga del siglo XXI son las enfermedades psicológicas y bien es cierto que muchas enfermedades a la larga hacen que se desarrollen otras patologías psíquicas o físicas, es lo que se denomina cormorbilidad. La mayoría de las veces los tratamientos no curan las enfermedades y muchos casos lo único que hacen es aliviar el dolor.

En países como España hay unos seis millones de jubilados, que además de no trabajar suponen un gasto importante para el Estado en pensiones y sanidad, muchos de ellos alargan su vida mediante los medicamentos. Por otra parte existe en ese país una ingente cantidad de jóvenes, y no tan jóvenes que utilizan las drogas de un modo lúdico-festivo. Es este caso los estupefacientes no se usan para alargar la vida sino para vivir momentos de ésta de un modo más intenso. La juventud, en plena crisis, no tiene esperanzas de un futuro aceptable y prefiere vivir el presente, igual que el segmento de la sociedad considerado de la tercera edad, con el matiz aquí de que tienen la certeza de que su futuro no será más saludable y por eso se contentan con vivir confortablemente el tiempo que les queda. Con todo esto se puede concluir que la sociedad se apoya en sustancias para ser feliz pero no quiere dar un tratamiento personalizado a sus problemas. Muchas veces la vida social hace que los problemas o enfermedades se agraven, cada persona está aleccionada a actuar sistemáticamente a favor de sus intereses individuales y pasa muchas veces que cuando uno cree que le están ayudando en realidad está justificando sus vicios con el apoyo de otros, haciendo que se conjuguen a unísono dos intereses egoístas.

Cuando uno está enfermo o tiene una enfermedad incurable muchas veces o no quiere acudir a un médico por miedo o intenta buscar cualquier solución alternativa a la medicina tradicional. Aprovechando esta coyuntura muchos intentan desarrollar terapias alternativas que sean menos invasivas y que no vuelvan a la gente dependiente de sustancias cuyo abuso es posible que acabe provocando perjuicios mayores para la salud y bienestar de los pacientes. Si bien es cierto que muchas de éstas técnicas alternativas resultan ser una estafa para engañar a mucha gente desesperada, también hay otras cuya efectividad ha sido probada, es el caso de las terapias de EFT y de Reimprimación Matricial o RM. Los críticos de estas técnicas alegan que su base es pseudocientífica y sugieren que cualquier beneficio que surge de ellas se debe a componentes cognitivos tradicionales, como el efecto placebo y los beneficios que supone el tener alguien con quien hablar. Surgen muchas dudas sobre estas técnicas pero el tiempo dirá si son realmente efectivas o son un burdo fraude, de momento sólo la EFT lleva al menos 20 años practicándose.

He tenido la ocasión de conocer a Alex Fish, el cual lleva varios años estudiando las técnicas de EFT y de RM. En un futuro tiene previsto acudir a Londres para realizar unos cursos que le den el diploma oficial de terapeuta energético. Cuando acabe su formación quiere ejercer el oficio en su país natal, Rumanía, creando un gabinete de terapia energética y así poder curar a sus compatriotas con estas terapias alternativas. Alex ha recopilado mucha información sobre estas terapias alternativas y quiere escribir dos libros: Uno versaría sobre la funcionalidad y la evolución de la humanidad y del universo, y el segundo tendría que ver con las terapias EFT y de RM en las 5 leyes biológicas. Gracias a Alex he podido conocer estas nuevas técnicas y aplicarlas personalmente, con algún resultado positivo. Os voy a explicar brevemente en que consisten estas técnicas por si algún día os pudieran ayudar.

Tanto la EFT como la RM provienen de la acupuntura china y la programación neurolingüística (PNL), que constituye un modelo dinámico y formal sobre cómo funciona la mente humana y la manera de procesar la información para orientarla hacia el éxito personal. La PNL también sirve para descargar la energía negativa acumulada en el sistema energético cuando se produjeron traumas emocionales. Se considera que Richar Badler y John Grinder son los verdaderos padres de la PNL. La PNL empezó a desarrollarse en el ámbito de la psicología y pedagogía y al obtener éxito se extendió en otras disciplinas llegando a ser aceptada de modo general y utilizándose incluso en el mundo de la economía. La PNL se basa en las estructuras neurológicas y la manera que operan éstas a través de los sentidos, enfatizándolo todo en el aspecto lingüístico de nuestra comunicación, pues por medio de éste constituimos nuestra realidad. La idea es que los programas mentales actúan de modo parecido a como lo hace un ordenador y de esta manera se puede incidir en este aspecto del pensamiento humano para solucionar problemas complejos. La base de estos conocimientos es que todos los seres humanos somos energía, poseyendo un sistema energético que es susceptible de tener pérdidas de energía. Nuestro sistema energético tiene 4 partes principales: el físico, el mental, el emocional y el espiritual.



La EFT o Emotional Freedom Teraphy, en español técnica de liberación emocional o técnica de descarga de energía negativa, es una aplicación de psicoterapia alternativa que se basa en presionar unos puntos energéticos del cuerpo mediante los dedos índice y pulgar, lo cuales se conocen como meridianos. La EFT se inspira en el método de la acupuntura china, que elaboró un diagrama de los canales energéticos del cuerpo, pero haciéndolo más fácilmente asimilable. Mediante estas sesiones de digipuntura el curandero incide sobre unos lugares situados en el cráneo, el esternón y las manos; mientras tanto el paciente tiene que pensar y pronunciar en voz alta su problema mientras piensa en él y se recitan palabras positivas para intentar liberarse de sus males. La EFT la puedes usar para dolores o sentimientos malos que uno tiene. Así como nosotros hoy en día usamos pantallas táctiles para reproducir en los ordenadores diferentes procesos y trabajar con ellos, lo que significa que hay un sistema energético en el que interactuamos, otra gente se preocupa por descubrir cómo funcionan otros sistemas energéticos, como el de los meridianos de energía que posee el cuerpo humano, es el caso que ocupa a las técnicas EFT. En el mundo hay 28 maestros EFT, la mayoría de ellos en Inglaterra y en EEUU, dónde estas terapias tienen más aceptación entre la gente. Gary Craig es considerado el fundador de la terapia EFT y escribió en su día un manual de EFT. Lo que animó a Gary Craig a crear las terapias EFT fue un pensamiento que tenía desde su infancia, por el cual llegó a la conclusión de que la cualidad de sus pensamientos era reflejada en la cualidad de su vida, algo que se refleja en un libro de autoayuda que ha tenido mucho éxito, llamado El secreto. Craig no es ni psicólogo ni médico, es ingeniero, y con su interés por el saber cogió del doctor Roger Callahan sus técnicas de Thought Field Therapy o TFT para adaptarlas a su método, más simplificado y fácil de asimilar. En los '90 el doctor Callahan tenía un paciente que tenía fobia al agua, y esta fobia se manifestaba también como dolor en el vientre. El doctor, por intuición, empezó a aplicar unos estímulos al meridiano del estómago obteniendo resultados positivos al comprobar que al paciente ya no le dolía tanto el estómago; este fue el principio por el cual se desarrollaron las técnicas EFT. El EFT, según sus practicantes, no funciona para todo, pero se puede usar por cualquier dolencia y la experiencia demuestra que tiene mucho éxito. El EFT es una técnica muy innovadora que incluso puede uno autoaplicarse individualmente.

Hace 5 años, apareció la Reimprimación Matricial,desarrollada por un máster EFT. La RM descarga toda la tensión acumulada desde que el óvulo entra en contacto con el espermatozoide. Esta técnica entiende que desde ese momento todo lo que se siente mal se graba en el subconsciente como campos de energía negativos. Una terapia de RM homologada costaría en torno a los 75 libras, que al cambio serían unos 90 euros, por una hora y media de servicio. La RM se desarrolla basándose en múltiples conocimientos, entre ellos la psicología, pero también la física cuántica. La psicología siempre se ha referido al niño interior, igual que la RM. Comunicándose uno con su niño interior que ha sufrido un trauma determinado que afecta actualmente y haciéndole EFT con la imaginación se descarga el trauma negativo. La física cuántica dice que todos somos una nube de energía cósmica unida, que todos somos uno y que nuestra base de funcionamiento se constituye en base a la energía. Anteriormente a la física cuántica nos regíamos por la física newtoniana, la cual establece que todo lo que existe es lo material, por lo que todo se reduce a cosas y se separa para ser controlado, sin embargo con la física cuántica la perspectiva cambia, llegando a la conclusión de que todos estamos construidos por la misma consciencia divina, y por lo tanto nosotros creamos nuestro mundo por medio de nuestros pensamientos y emociones. La RM utiliza las frecuencias más profundas del interior del ser humano para cambiar las negativas en positivas y de esta manera cambiar la expresión humana en esta realidad, adquiriendo otras creencias y otros comportamientos. En teoría la RM hace que se acelere la evolución humana. En el inconsciente, donde se halla el niño interior, no existen ni el pasado ni el futuro, sólo un presente, el cual se ve afectado por lo que ha pasado hace muchos años. Lo que en definitiva hace la RM es implantar memorias nuevas que proyectarán experiencias nuevas en el futuro.


Alex, estudiante de las técnicas de EFT y RM

sábado, 19 de enero de 2013

La cibernética en la política

El ser humano puede imaginar mundos inexistentes. Cada uno de nosotros puede comprender misterios inimaginables, mundos de fantasía o de ciencia ficción y ventanas ocultas hacia mundos espirituales. Muchas veces delegamos la mayor parte de estas verdades hacia el inconsciente. Suele pasar a veces que determinadas palabras o conceptos se aprenden e interiorizan sin que profundicemos en ellos con toda su amplitud. Dejamos la mayor parte del peso de la comprensión de las palabras en la imagen que nos transmiten los sentimientos más apasionados, así como a la palabra democracia la asociamos con la facultad de votar. Esto se debe a que objetivamente buscamos el significado original de los conceptos en base a asociarlos por nomenclaturas. ¿ Qué trampas inexistentes, que ni siquiera podemos casi intuir, se esconden en unos sistemas electorales que consideramos tan limpios y democráticos?.

Yo me pregunto hasta dónde es admisible eso de que el voto sea secreto, para que, por lo tanto, sea anónimo. Uno no puede dejar de sentirse con voto pero sin voz. Solo se pueden elegir en política siete colores, pero no puedes pintar con ellos. A lo sumo puedes contemplar un cuadro, una obra de arte que se admira desde hace siglos, pero con una tonalidad diferente que predomina y tu puedes elegir, eso sí, la elección es libre. Pero la retina que lo admira todo se encuentra en un mundo que podemos utilizar pero no observarlo en sí mismo. No pueden darse entre nosotros conocimientos sin una unidad de conciencia que sea anterior a los datos procesados. Podríamos afirmar así que todo el conocimiento científico no es verdadero al 100%, pero lo aceptamos porque mayoritariamente lo hemos aprendido. Medimos el tiempo en presente, pasado y futuro; como medimos el espacio en alto, ancho y largo. Nos adaptamos a las circunstancias, pero los problemas indirectos vienen cuando las circunstancias han sido circunstanciadas. Cuando lo real no es auténtico, o por lo menos en el sentido que se nos quieren hacer entender.

El mundo de los derechos y libertades es tan sencillo que se complica para poder acotarlos y hacerlos así secuenciables. Todo está bastante planificado de alguna manera y se da en el capitalismo, no el el comunismo. Pero darle a algo un significado es una apreciación muy reducida de los hechos. No puedes ver de izquierda a derecha sin poder también de arriba a bajo o hacia delante o hacia atrás. No todos somos expertos en todas las materias, si fuera así seguramente el capitalismo no entraría en crisis cíclicas y encontraríamos todos prosperidad y bienestar.

Si observamos todo lo que se puede representar como un perfomance, del arte de vitorear a los grandes tesoros sagrados de la política en un hemiciclo, analizándolo bien, que se vote allí algo, políticamente, no importa mucho. Un ejemplo que nos acercaría a esta situación sería el régimen jurídico por el cual los partidos no están obligados a cumplir sus promesas electorales. Le damos mucha importancia al voto, pero la razón de esa importancia realmente está vacía de contenido, el problema es que subconscientemente creemos que sí tiene esa importancia. Con lo cual nos encontramos que una pequeña minoría controla una sociedad gracias a representarse en las altas esferas de influencia naturales de los partidos sin que la gran mayoría de votantes se entere, es más muchos los aplauden y los toman como modelo a seguir porque representan sus aspiraciones hechas realidad. Por todo esto creo que el voto no es secreto, más bien es sordomudo.

No llega la cosa a un listón fácilmente determinable. El artículo 67.2 de la constitución española establece que los diputados y senadores no estarán sometidos a ningún mandato imperativo. Esto significa que los miembros de las cámaras, elegidos democráticamente por los ciudadanos, no tienen ninguna obligación de someterse a una orden vertical de su partido para votar a favor o en contra de alguna cuestión de trascendencia parlamentaria. Sin embargo es bien sabido que los partidos políticos coptan esta libertad teórica de votos de los parlamentarios, ordenando que voten los diputados y senadores en una determinada dirección, según cual sea lo establecido, en la opinión oficial marcada por el politburó del partido.

Desde el comienzo de nuestra estratificación social los gobernantes y políticos han intentado ordenar la sociedad en función de su influencia en el poder. ¿Pero Somos realmente conscientes de todas las visicitudes y complicaciones que crea una auténtica democracia?. Todo lo que ya se creo y continúa efectivo y latente en el inconsciente colectivo y que aceptamos conscientemente, que nos puede perjudicar en muchas facetas que ni siquiera podemos ni imaginar, de lo cual tenemos que escapar para llegar a la entelequia de lo que sería la democracia real.

El derecho a la libertad de expresión e información podemos imaginarlo en el primer escalón de los derechos políticos. El segundo el derecho a la libertad de reunión y manifestación. El tercero es derecho de asociación y organización. Y el cuarto el derecho al sufragio activo y pasivo. Pero en la práctica, si lo analizamos consecuentemente, se configura todo como una estafa piramidal. Dónde lo más importante es la cúspide y lo que más se proyecta a simple vista sobre toda la estructura, lo que destaca más de toda la figura. Si lo pensamos bien pirámide es la construcción más fácilmente edificable desde el tejado.

Fue un gran avance en la historia de la humanidad la revolución francesa. Gracias a las infraestructuras institucionales que se crearon se ordenaron los poderes nacionales en tres tipos: legislativo, ejecutivo y judicial. Pero esta cosmovisión filosófica de Montesquieu no era perfecta. De la práctica jurídica los filósofos ilustrados comenzaron a darse cuenta de la influencia de los medios de comunicación, los cuales eran considerados como el cuarto poder. Ahora tenemos internet y las redes sociales, un elemento que puede resonar a expansión, al cual se le considera el quinto poder. Esto hace más fácil llegar donde siempre ha habido telarañas. Con internet el cuarto poder se multiplica, adquiere más sentido y coge más personalidad gracias a ese quinto poder, aparentemente escondido en la sombra, que es como la cara oscura de la luna, que aunque exista nunca se nos quiere mostrar. Pero aunque parezca escondida la podemos ver, y en ese lado brilla también la luz del sol. Quizás la nueva época sea la de la revolución de internet. Pero es incierto cuando eclosionará para que se considere histórico.

Desde la creación de la Constitución francesa mucho ha llovido desde entonces y nunca a gusto de todos. Podíamos considerar como democracia el gobierno del pueblo, pero con el paso del tiempo el concepto evolucionó, y la democracia acabó siendo el gobierno de los elegidos por el pueblo. ¿Como fue tal la evolución de los conceptos?. Posiblemente eso se debiera a que las redes de información especializadas no fueran democráticamente asociadas por los receptores. Sin embargo una vez aceptada una condición inconscientemente se empieza a actuar conforme a ese estado de las cosas. La condición aquí de la parte más débil del contrato, la que debería de sufragar las cargas más onerosas y verse perjudicada en un hipotético sistema de igualdad de condiciones. Aceptada a someterse a ciertas fuerzas que veía muy difíciles de controlar, y que estaban escondidas.

Lo bueno en política es que no se hable de los políticos y de su papel, la parte floja entiende pero no comprende, pero se desprende cuando se da cuenta de lo que depende realmente. Aquí podríamos decir que ha renacido un muerto, un zombi de esos que sólo puedes matar si les disparas en la quijada.

La información más cercana y mejor contrastada, una nueva constitución con códigos ocultos que se va perfeccionando a si misma, eso puede ser internet. Porque anteriormente la información venía de un editor determinado, el cual actuaba como un relaciones públicas, es decir, favorecía de alguna manera ciertas influencias que le enriquecían. Ahora la información viene de manera más descentralizada, tanto por su origen como por su forma. El contenido en sí tiene una importancia relativa, pero lo más trascendental de todo es la importancia que le demos a ese contenido. Y de ahí viene sobre todo a darle valor a una buena interpretación. La gente que tiene mucha influencia social o política tiende a expresar indirectamente sus verdaderos pensamientos. Suele ocurrir que las noticias más importantes no anden escondida delante, o detrás, de un parabán, pero eso no significa que a todos nos interesen esas noticias.

Las nuevas redes que intentan captar peces indefensos empiezan a resquebrajarse porque no tienen una buena memoria de crecimiento. Suele ocurrir con las nuevas tecnologías que los avances dejan en evidencia a la industria, que se tiene que adaptar para amoldar las ventajas a la demanda a la cual pueden responder los consumidores. La política actual precisa de un tiempo de adaptación a las consecuencias que internet y las nuevas tecnologías tienen que imprimir en la gente necesariamente. Muchos ahora se sienten defraudados de tanto tiempo perdido por delegar en cosmopolitas nuestro conocimiento. Ahora el conocimiento es exponencialmente contrastable. La regla de medir las cosas y tener de ellas un conocimiento más relevante se hace más pequeña, pero el área de medir se hace extensa. Quizás algunos sólo puedan elegir entre volar o nadar para no caer en las nuevas redes virtuales, otros quizás empiecen a tejerlas, considerándose como los primeros artesanos de una nueva revolución.